lunes, 30 de septiembre de 2013

“Conociendo la Feria del Estero Marga Marga”







            Si vas para Viña del mar  te podrás encontrar con variadas ferias pero la más grande y más conocida es la llamada “Feria del Estero Marga Marga” o antiguamente llamada Feria de los Camiones. Está ubicada a un costado de Uno Norte cerca del puente Cancha.

Antiguamente la feria se llamaba “Feria de los camiones”, ya que éstos se estacionaban a vender frutas y verduras a la población. Con el tiempo se transformó en una feria con puestos, donde cada persona tenía que montar el puesto los cuales eran de madera, y al finalizar el día tenían que desmontarlo, una particularidad que tenía era que sus calles eran de tierra.

Con el tiempo la feria ha ido evolucionando, hoy en día las calles son pavimentadas, los puestos de cada feriante son de fierro y cuentan con toldos de lona. Están permanentemente todo el año. Se pueden encontrar todo tipo de verduras, frutas, pescados, aceitunas, legumbres, flores, huevos, etc. Además dentro de la feria se venden bolsas de plástico, para poder trasladar lo comprado al interior de ésta.
 Hoy en día los feriantes están organizados por medio de un sindicato, lo cual lo componen más de 300 puestos, los cuales se han ordenado y han contratado seguridad para la misma feria y para sus clientes. Gracias a la organización de los feriantes existen jóvenes establecidos para ayudar a la clientela a cargar las compras, estos jóvenes se deben inscribir y tienen un distintivo, que consiste en un peto color verde para poder realizar esta labor. 
Los dueños de cada puesto deben pagarle a la municipalidad por ocupar este espacio en el estero.

Esta gran feria abre dos días a la semana, miércoles y sábado desde las 7 de la mañana hasta alrededor de las 19 horas. Mientras más temprano se va, mejor son la calidad de los productos, pero más caro es; ya que cuando cierra o queda poca mercadería el feriante empieza a rematar.

Si quiere ir con tranquilidad hay que ir alrededor de las 8 o 9 de la mañana ya que hay poca gente y se encuentran productos de buena calidad. No vaya al medio día ya que se encontrara con un mar de gente.
Acá se ve todo tipo de gente, desde jóvenes hasta la tercera edad, la feria no tiene discriminación sirve tanto para el pobre como para el rico. El cliente que más asiste es del sexo femenino, muy orientado a la dueña de casa que va los días sábados.

 El feriante además de instalarse tienen que estar todo el día, por lo cual tiene que llevar desayuno y almuerzo.  Por lo general en la mañana se toman un té o café para calentar el cuerpo y para echar al estómago se comen un pan con alguna mortadela o mermelada. Y para el almuerzo se llevan preparado algún tipo de guiso, sobre todo en el invierno. 

            Cada feriante se ha especializado en vender algún producto específico, por ejemplo algún tipo frutas, verduras, la cuales son adquiridas del interior de la ciudad jardín como Quilpué, Limache, Quillota, entre otras. Muchos de ellos tienen campo donde las pueden cultivar o tienen sus contactos para adquirirlas a buen precio y así poder traerlas a la feria. Es por eso que también su jornada empieza muy temprano en la mañana ya que se traen directo de estas zonas y viene frescas.

            Los precios van variando a lo largo del año, ya que se depende de las estaciones porque según éstas es la temporada de cada producto. Por ende hay veces que se encuentran por ejemplo los limones caros, las paltas, los tomates, etc. 

            Cada feriante tiene a sus caseros como lo llaman ellos, esto quiere decir que hay clientes habituales que siempre les compra ya sea el día miércoles, sábado o ambos. El señor Juan, feriante de hace más de 50 años conoce a varias familias y a varias personas, de todo tipo de estrato social - “acá se atiende a todo público, todo el mundo quiere productos ricos y  baratos”-.

 Si eres cliente frecuente de algún feriante es decir, tienes a tu casero, es típico ver como se negocia, aquí la gente aprovecha de regatear o  debatir que le rebajen el precio o  que le den con “llapa” que significa que le regalen un par de gramos, o le dé una verdura o fruta más.

Mi tía, hermana de mi mamá ya lleva más de 35 años yendo a la feria y mucho tiempo comprándole a la misma persona. Se ha cambiado tres veces de casero por diferentes razones ;y el que tiene hoy en día fue mera casualidad, ya que no los elige, solo le empezó a comprar a él. Su puesto está ubicado en la entrada del centro de la feria.

Se llama “Pato”, tiene 35 años, no se sabe si es casado pero tiene una pareja que siempre lo llama para controlarlo. Pato tiene un ayudante que lo ayuda en descargar el camión, montar las frutas y verduras en el puesto de trabajo y a atender al público, el joven tiene 24 años.

Al ir a la feria los personajes típicos que se pueden ver son variados, uno de ellos es un señor que pasa con un carro donde vende te, café y sándwiches, otro  señor de más edad que pasa por toda la feria vendiendo empanadas de queso fritas. Igualmente hay una mujer que toma la presión y da ayuda de primeros auxilios.

Es por esto que la gente o uds mismo prefiere comprar hacer sus compras en la feria ya que los productos son frescos, de buena calidad y además porque tiene una tradición que se ha ido pasado de generación en generación. NO DEJE DE IR A LA FERIA

Dulce pero dulce dulce